Según la organización Internacional de Trabajo – OIT, el desempleo en América Latina ascendió este año a una tasa del 8%, cifra igual a la del 2018 pero menor al 6,1% alcanzado en el 2014, año que se registró la menor tasa de los últimos 9 años.
Sin embargo, considerando la actual situación económica de la región, la tasa podría seguir subiendo ya que las últimas estimaciones de CEPAL1 indican que la economia latina estaría creciendo alrededor del 0,5% en el 2019.
El menor desempeño de las principales economías regionales como Brasil y México que tendrán un crecimiento moderado del 0,8% y 1,0% respectivamente y la crisis de Argentina, país para el que se prevé un decrecimiento del -1,8% en su PIB reducen las posibilidades de mejoras en cuanto a la situación laboral, sumado a la informalidad que afecta al 50% de los ocupados.
En este contexto, aproximadamente 10 millones de jóvenes de 15 a 24 años no consiguen un espacio en el mercado laboral lo que deriva a una tasa de desempleo del 18% para esta franja etaria. A ello se suma una informalidad del 60% y un 20% que no estudia ni trabaja.
Comparando con otras regiones, América Latina y el Caribe se encuentra entre las de mayor tasa de desocupados, estando por encima de la tasa mundial que es del 5% y siendo solamente superados por el Norte de África que cuenta con una tasa del 11,8%. Esto obliga a replantearse si las políticas económicas y sociales de la región son las ideales para lograr un mayor crecimiento y desarrollo de los países que lo componen.
1 Comisión Económica para América Latina y el Caribe.
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