Tras lecturas de inflación más altas de lo esperado, Jerome Powell, Presidente de la Reserva Federal de los Estados Unidos (FED), ha advertido recientemente sobre que las tasas de interés del país norteamericano deberían permanecer elevadas por más tiempo. Esto ha provocado un aumento en los rendimientos de bonos del Tesoro y el fortalecimiento del dólar.
Las declaraciones generaron preocupaciones en los bancos centrales del mundo debido a que una prolongada política monetaria restrictiva en EE.UU. limitaría su flexibilidad para adoptar políticas monetarias más expansivas.
Para muchos bancos centrales, participantes de las reuniones de primavera del FMI y el Banco Mundial, las declaraciones de Powell crean un dilema, dado que, si bien algunos como el Banco Central Europeo, consideran recortes en sus tasas para estimular el crecimiento, hacerlo podría debilitar sus monedas y aumentar la inflación de bienes importados. Este desafío se profundiza aún más en economías emergentes, donde la subida del dólar complica aún más la situación por el diferencial cambiario.
Ya estás suscripto