En la actualidad está tomando mucha fuerza la tendencia del talento Boomerang (Búmeran). Es un fenómeno que se ha hecho presente sobre todo en la generación millenial y podría reforzarse con los Z, es tan grande el impacto, que está creando un cambio de chip en las organizaciones. Pero… ¿quiénes son los Talentos Boomerang?

El talento Boomerang es aquel que retorna a una organización luego de haber pasado por otras experiencias. Es un profesional muy valioso por todo lo que conoce y ha vivido en la empresa además de todo lo nuevo que puede sumar. Es normal que las organizaciones pongan mucho empeño en atraer, fidelizar, generar experiencias atractivas y sólidas para el talento, sin embargo, no es común darle la misma importancia al proceso de offboarding (es el proceso de desvinculación laboral de un colaborador y todas las aristas que hacen a este trámite).

Por lo general es poca la atención que se le brinda al proceso de salida, con la falsa idea que no vale la pena invertir tiempo en un talento que se va. Muchas organizaciones van ingresando a la lista de empresas que cuentan con “Talentos Boomerang” en sus equipos, además de conseguir grandes resultados, han ganado a un colaborador que retorna con mucha más experiencia e ideas.

¿Te gustaría ser parte de la lista de organizaciones que tienen en sus filas a Talentos Boomerang? Aquí te mostramos 4 tips que deberías tener en cuenta para lograrlo:

1. Prestar atención a la experiencia del colaborador: la única manera de generar un buen recuerdo en el colaborador es cuidando su experiencia durante su permanencia en la organización. Claramente no con el afán de que algún día se vaya, sino simplemente para que llegado el momento o cumplido el ciclo… sean grandes embajadores de la marca y por qué no… llegar a ser un Talento Boomerang muy valioso.
2. Implementar un buen proceso de offboarding: en las organizaciones – guste o no – llega un determinado momento en que el talento más preciado decide irse para vivir otras experiencias, es ahí donde suelen darse las conversaciones más genuinas, y es una gran oportunidad para felicitar a la persona por su nuevo desafío, expresarle que las puertas de la empresa quedan abiertas para cuando crea que podría retornar. Yendo mucho más allá, incluso se le podría acompañar en la toma de decisión para su crecimiento profesional.
    
3. Conservar el contacto: tener como premisa “no perder el contacto” con el talento que se va, hay muchos canales de comunicación para mantener el vínculo. Por ejemplo: las distintas plataformas de redes sociales.
    
4. Formar y desarrollar nuevos líderes: ser líder se basa en desarrollar todo el potencial de las personas que forman parte del equipo, obtener lo mejor de cada miembro. Facilitar las condiciones para que lleguen a sus metas. Propiciar que tomen impulso y dejar volar.

Henry Ford decía que: “solo hay algo peor que formar a tus empleados y que se vayan… No formarlos y que se queden”. El desafío es ese… ser capaces de tejer alas sin tener miedo a dejar volar  -llegado el momento-.