Debido en parte a un mayor nivel de reexportaciones, las exportaciones totales sumaron USD 9.462,1 millones a agosto, lo cual representa un incremento de 30,6% interanual. Un comportamiento con signo similar se verificó por el lado de las importaciones, donde las registradas impulsaron al total de USD 7.917,6 millones, 24,1% más que el pasado año.

De esta manera, el saldo de la balanza comercial del periodo fue superavitario en USD 1.544,5 millones, el acumulado más alto en los últimos cuatro años. Dicho desempeño es en parte un reflejo de la incidencia del aumento en los precios de commodities, que a su vez se trasladan a los principales productos de exportación, con un impacto tanto en la oferta de estos bienes como en la capacidad de pago de los productores.

Si bien el comercio exterior sigue recuperándose en consonancia con la mejora en la actividad económica, el escenario de riesgo más complejo está relacionado con las disrupciones en las cadenas de producción a nivel global, que sumadas a la bajante hídrica pueden generar desafíos para el comercio y el costo de los bienes, en especial para los de manufactura.

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