El día de ayer el BCP anunció que reduciría nuevamente el encaje legal en moneda local y extranjera en 2 p.p. con lo que el sistema financiero podría disponer de aproximadamente USD 957 millones para la concesión de nuevos créditos y para la renegociación de las operaciones existentes cuyos titulares se vean afectados por la menor actividad económica causada por el Covid-19.

Así también, implementará una ventanilla adicional de liquidez que posibilitará a las entidades financieras supervisadas realizar operaciones de descuento de cartera de alta calidad crediticia, con retroventa (REPO).

Estas medidas pretenden aumentar la liquidez de las entidades de modo a que los recursos sean canalizados hacia las empresas y sectores afectados que requieran de fondos para capital operativo o pago de nómina, entre otros, y así mantener el empleo. Sin embargo, el problema principal del sistema financiero no sería la liquidez, considerando que esta a febrero era del 113,83% y que el ritmo de crecimiento de la cartera había disminuido, sino más bien el obstáculo sería el riesgo que significa otorgar créditos en esta crisis.