
La semana pasada, la calificadora mejoró la perspectiva en la nota BB+ de Paraguay con respecto a su capacidad de pago a acreedores. La prudencia fiscal es uno de los principales condicionamientos que S&P pone hacia adelante.
En el documento publicado, se apunta que el retorno al déficit del 1,5% del PIB en la balanza fiscal llegaría recién en el 2027 y no en el 2026, como proyecta el gobierno local.
En este mismo sentido, S&P Global proyecta un déficit fiscal del 2,1% del PIB para este 2025, también por encima de la proyección del 1,9% presentada por las autoridades paraguayas.
Días atrás, la calificadora internacional de riesgo S&P Global Ratings mejoró la perspectiva de la nota BB+ que tiene asignada a Paraguay desde el año pasado con respecto a su capacidad de pago de deuda. Así, nuestro país se ubica muy cerca del grado de inversión también en los términos de la metodología de esta calificadora, recordando que ya lo es según la apreciación de Moody’s.
Como es costumbre, esta noticia fue anunciada por S&P Global junto con un documento en el cual se detallan los aspectos positivos y negativos que nota con respecto a la economía paraguaya y su capacidad de pago. En este sentido, uno de los principales condicionamientos establecidos para mejorar la nota, es seguir con el plan del gobierno con respecto a la convergencia fiscal.
Vale recordar que Paraguay cuenta con una Ley de Responsabilidad Fiscal, según la cual el balance de las cuentas públicas cada año debe tener un déficit que represente como máximo el 1,5% del Producto Interno Bruto (PIB), salvo excepciones específicas. Esta regla no se ha podido cumplir en los últimos años como consecuencia de la pandemia y de deudas no registradas a tiempo.
Según la estimación oficial del gobierno local, el déficit fiscal debería cerrar este año en 1,9% del PIB y volver a la regla fiscal del 1,5% para el 2026. Sin embargo, las proyecciones de S&P Global Ratings no coinciden exactamente con las estimaciones oficiales (aunque se aproximan), ya que la calificadora proyecta un déficit fiscal del 2,1% para este año y del 1,6% para el 2026.
Así, según las estimaciones realizadas por la calificadora internacional, nuestro país volvería a su regla de responsabilidad fiscal recién para el 2027. No obstante, en el mismo documento se apunta que en el caso de que se logre un crecimiento sostenido de la economía a lo largo del tiempo, esto ayudará a que dicha convergencia se consolide en un periodo de tiempo más corto.
“El perfil fiscal se ha visto afectado por una serie de shocks externos que desaceleraron el crecimiento, mientras que las políticas contracíclicas aumentaron el gasto”, se recuerda en la publicación de S&P, con respecto a las cuentas fiscales de Paraguay. “La prudencia reforzará las finanzas del soberano (Parguay) y estabilizará su carga de deuda en un nivel bajo, con lo que podrá fortalecer la resiliencia del país frente a crisis inesperadas”, vaticina la calificadora.
Según el informe oficial de Situación Financiera del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), al cierre del año 2024, se registró un déficit fiscal acumulado de Gs. 8.628 mil millones (-2,6% del PIB), equivalente a USD 1.122 millones. Asimismo, un déficit operativo de Gs. 2.263 mil millones (- 0,7% del PIB), equivalente a USD 286 millones.