La directora del FMI, Kristalina Georgieva, manifestó que el organismo se encuentra intensificando esfuerzos para la toma de decisiones en torno a las monedas digitales, CBDC (por sus siglas en inglés, Central Bank Digital Currency).

El FMI está trabajando en la interoperabilidad de pagos entre las distintas monedas digitales emitidas por los bancos centrales de tal manera que se logren transacciones transnacionales más eficientes y se pueda crear un sistema que conecte entre los países.

Cabe señalar que el concepto de moneda digital se diferencia de la criptomoneda en el sentido que las primeras están reguladas por un banco central y por ende cuentan con el respaldo del mismo, mientras que las segundas están descentralizadas.

El avance ordenado en la consolidación de las monedas digitales podría contribuir a promover la inclusión financiera y a generar un ahorro de costos entre los intermediarios, que se estima en USD 45.000 millones, lo que podría suponer un beneficio también para otras operaciones como las remesas.